Camboya ha tenido un pobre historial de tráfico de personas. Muchos trabajadores extranjeros han llegado al país con la esperanza de conseguir un trabajo; algunos han sido atraídos por estafadores que les aseguraban que el empleo ya les estaba esperando. Sin embargo, muchos han sido víctimas de los traficantes de personas hasta el punto de que China ha intervenido y ha utilizado su influencia financiera y geopolítica para instar a las autoridades de Phnom Penh para que se tome en serio el problema y se enfrente a las redes de tráfico.
El pobre historial de tráfico de personas de Camboya
Hasta ahora, las cosas han ido despacio, pero algunos trabajadores de casinos extranjeros han podido escapar por su cuenta. Ya sea por los traficantes de personas, por la inmigración ilegal o por las deplorables condiciones de trabajo, el flujo de trabajadores en Camboya no ha dejado de salir.
Sin embargo, la historia de los trabajadores de los casinos de la semana pasada pone de relieve lo mucho que queda por hacer para garantizar que los traficantes de personas sean llevados ante la justicia. Al menos 40 personas se abrieron paso una valla en el Casino Golden Phoenix Entertainment en Koh Thom y cruzó a nado el río hasta Vietnam, según informó el medio local The Khmer Times.
El grupo tuvo un altercado con varios guardias antes de cruzar el río. Tres guardias de seguridad resultaron heridos cuando los trabajadores intentaron abandonar las instalaciones. Las razones exactas que motivaron la espontánea y peligrosa decisión de las 40 personas no fueron verificadas inmediatamente. Los medios de comunicación locales informaron de que las autoridades antiinmigración se habían acercado, mientras que otros informes afirmaban que las personas estaban sometidas a condiciones laborales de esclavitud.
El ministro del Interior de Camboya también emitió una declaración oficial sobre el asunto, Sar Kheng, quien dijo que algunos de los empleados alegaban unas condiciones de trabajo agotadoras e inhumanas, con turnos de 14 horas y sin una buena compensación. Kheng tampoco estaba muy seguro de los detalles.
Según el funcionario, la gente «podría» haber estado trabajando ilegalmente en el país. Kheng añadió que, si bien se prometió una remuneración y se acordaron ciertas tarifas, éstas no se cumplieron en su totalidad. Un total de 35 hombres y cinco mujeres emprendieron el viaje a través del río con Vietnam. Ya se ha encontrado a todas las víctimas, confirmó Kheng, y se ha detenido al director del casino.
Humillados e insultados
La idea de que los casinos atraigan mano de obra barata del extranjero y no cumplan sus promesas de pago y condiciones de trabajo no es nueva. Ha sido un problema perenne de los casinos camboyanos, que ha hecho que muchos se resistan a probar suerte en la sórdida industria del juego del país. Los gerentes de los casinos poco concienciados se han beneficiado de que muchos de los trabajadores que llegan son inmigrantes no registrados, sin estatus legal en el país y sin ayuda de la ley.
Sin embargo, la presión ejercida por los grandes de la región, como China, ha hecho que las autoridades camboyanas sean más conscientes del problema. Camboya también ha sido incluida en varias listas de vigilancia mundial por su incapacidad para hacer frente al blanqueo de dinero y al tráfico de personas, lo que ha irritado a las autoridades de Phnom Penh.