El presidente en funciones, Alexander Van der Bellen, ganó un nuevo mandato en las elecciones presidenciales de Austria celebradas el domingo, al obtener más del 50% de los votos en la primera vuelta, según los sondeos a pie de urna.
Según un sondeo realizado por el instituto SORA para la cadena pública austriaca ORF, Van der Bellen (78), antiguo líder de los Verdes, obtuvo el 54,6% de los votos, informa Agerpres.
En segundo lugar quedó su principal contrincante, Walter Rosenkranz, representante del Partido de la Libertad de Austria (FPO), con el 18,9% de los votos. El margen de error es de 2,1 puntos porcentuales.
Antes de la votación, Rosenkranz sólo contaba con el 15% de los votos.
Los escándalos de corrupción hicieron que la extrema derecha perdiera terreno en las preferencias del electorado austriaco.
Alexander Van der Bellen, cuyo cargo es eminentemente ceremonial, garantizó la continuidad del Estado.
Así, pudo presentarse como «el único con poder para evitar el caos», según el politólogo Thomas Hofer.
Según Julia Partheymüller, de la Universidad de Viena, Van der Bellen hizo una campaña electoral sobria, prometiendo «transparencia y competencia para atravesar las turbulencias de la forma más suave posible».