El sábado por la noche se produjo una estampida en Corea del Sur después de que casi 100.000 personas salieran a las calles de Seúl para celebrar el primer Halloween sin restricciones después de tres años de pandemónium. La tragedia tuvo lugar en Itaewon, una zona famosa por la vida nocturna de la capital surcoreana, informa la BBC.
Los mensajes de las redes sociales publicados a primera hora de la tarde mostraban que la zona estaba tan concurrida que algunos usuarios dijeron sentirse inseguros.
Inicialmente se informó de 59 muertes, pero el número de víctimas se elevó posteriormente a 120 personas muertas y otras 100 heridas, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap, citada por Digi 24.
Desgraciadamente, el número de muertos podría aumentar de nuevo, ya que muchos de los heridos fueron trasladados al hospital en parada cardíaca.
74 personas fueron trasladadas al hospital y allí se confirmó su fallecimiento, y 46 personas murieron en el acto.
El incidente se produjo en torno a las 22.20 hora local (13.20 GMT) cuando un gran número de personas cayó encima de otras en una calle estrecha durante los actos de Halloween, dijo un funcionario de los bomberos.
Pero aún no está claro qué causó el incidente. Lo único que se sabe es que la estampida se produjo supuestamente cerca del Hotel Hamilton, un popular lugar de fiesta en la ciudad.
Los medios de comunicación locales habían informado previamente de que un gran número de personas se dirigían a un bar de Itaewon tras oír que una celebridad había ido allí, informa The Guardian.
Varios extranjeros se encuentran entre los trasladados a hospitales cercanos, según Agerpres.
«Una multitud de jóvenes se ha reunido aquí esta tarde. Mucha gente había acudido a la fiesta y al club, con disfraces de Halloween, y ahora estoy viendo a mucha gente perturbada y triste y hay escenas caóticas», informó el corresponsal de la BBC.
A raíz de este lamentable suceso, el Presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, convocó una reunión de emergencia.
Además, ordenó el envío de un equipo de respuesta a la catástrofe a Itaewon.
Se movilizaron más de 400 trabajadores de emergencia de todo el país, incluidos casi todos los disponibles en Seúl.
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