
Jens Stoltenberg termina su mandato como Secretario General de la OTAN en septiembre de 2023 y muchos se preguntan quién le sucederá al frente de la alianza militar más poderosa del mundo. A lo largo de los años se han barajado muchos nombres, entre ellos el del presidente de Rumanía, Klaus Iohannis.
Sin embargo, la última lista de posibles jefes de la OTAN publicada por el New York Times no incluye al líder del Cotroceni. Sin embargo, hay algunas sorpresas entre los candidatos «elegidos» por la publicación estadounidense.
A quién quieren los estadounidenses para dirigir la OTAN
Así, según la fuente citada, podríamos tener una primicia: ¡una mujer al frente de la Alianza del Atlántico Norte! Según el New York Times, la favorita es Chrystia Freeland, de 54 años. Freeland es viceprimera ministra de Canadá y es una de las favoritas de Estados Unidos, que ya está presionando por ella.
Chrystia Freeland es de origen ucraniano. Anteriormente fue ministra de Asuntos Exteriores de Canadá. Domina cinco idiomas: inglés, francés, italiano, ucraniano y ruso. Si Freeland sucede a Jens Stoltenberg, sería la primera mujer de la historia en dirigir la OTAN, y la primera canadiense en ocupar ese rango.
The New York Times ha elaborado una lista de cinco nombres, y se espera que tres mujeres se presenten por el lado europeo: Kolinda Grabar-Kitarovic -ex presidenta de Croacia-, Kaja Kallas -primera ministra de Estonia- y Zuzana Caputova -presidenta de Eslovaquia-. Los británicos también quieren poner a su hombre al frente de la OTAN, Ben Wallace, actual ministro de Defensa.
En el pasado, Politico ha escrito que el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, también estaría en una lista corta de candidatos favoritos.
«La persona que obtenga el puesto asumirá sin duda el cargo en uno de los momentos más críticos de la historia de la Alianza del Atlántico Norte. La guerra en Ucrania ha supuesto más tropas de la OTAN en las fronteras de Rusia, posibles nuevos miembros en Suecia y Finlandia, y nuevas demandas de dinero y equipamiento. Aunque la OTAN funciona por consenso, su jefe desempeña un importante papel a la hora de conciliar las demandas de los Estados miembros y articular la posición de Occidente ante una audiencia global.
Hay problemas con todos los posibles candidatos. Un funcionario de la OTAN sugirió que es posible que los Estados miembros acuerden prorrogar el mandato de Stoltenberg un año más. La elección también podría complicarse con las elecciones de la primavera de 2024, que elegirán un nuevo liderazgo para la Unión Europea. Esto da inicio a un proceso profundamente competitivo entre los Estados miembros al repartir sus puestos«, señala The New York Times.