
Airbnb suspenderá sus operaciones en Rusia y Bielorrusia, anunció en un mensaje en Twitter el director ejecutivo de la plataforma de alquiler, Brian Chesky.
La empresa estadounidense es la última en anunciar que dejará de operar en los dos países.
Airbnb suspende todas sus operaciones en Rusia y Bielorrusia
-Brian Chesky @ (@bchesky) 4 de marzo de 2022
Brian Chesky también escribió que muchas personas alquilan apartamentos a través de Airbnb, en Ucrania, pero sin tener la intención de ir allí, sino solo para ayudar financieramente a los ucranianos que han registrado sus casas en la plataforma estadounidense.
Las personas están reservando Airbnbs en Ucrania en los que no tienen la intención de quedarse solo para ayudar a los anfitriones https://t.co/L6B11ioSXb
-Brian Chesky @ (@bchesky) 3 de marzo de 2022
Estados Unidos, así como otros países occidentales, han anunciado que pondrán fin a su cooperación con Rusia después de la invasión de Ucrania.
Ucrania, el noveno día de la guerra
Una columna de fuerzas rusas abrió fuego en la madrugada del viernes 4 de marzo contra la planta de energía nuclear más grande de Europa, que representa alrededor de una cuarta parte de la producción de energía de Ucrania. El ataque, que resultó en un incendio a gran escala cerca de los reactores nucleares, se produce pocas horas después de la segunda ronda de conversaciones entre Rusia y Ucrania.
Los dos estados dijeron el jueves que habían llegado a un acuerdo sobre «seguridad conjunta de los corredores humanitarios para la evacuación de civiles y también sobre el suministro de medicamentos y alimentos en las zonas más afectadas por los enfrentamientos». Para ello, se acordó la posibilidad de un alto el fuego temporal.
Al menos un millón de refugiados han huido de Ucrania hasta el momento, según estimaciones de la ONU, y se espera que millones más crucen la frontera en los próximos días. Los primeros ocho días de la guerra resultaron en pérdidas difíciles de cuantificar para ambos bandos.
Localidades enteras borradas del mapa de bombardeos, miles de viviendas, escuelas, hospitales, catedrales, instituciones públicas destruidas, cientos de civiles que perdieron la vida.
Los costos económicos de la guerra son aún más difíciles de predecir. La agencia calificadora S&P rebajó la calificación de Rusia a «CCC-» el jueves, después de que Fitch y Moody’s la rebajaran a «basura» el miércoles. Ucrania, a su vez, fue degradada la semana pasada por las agencias calificadoras y buscó asistencia financiera de emergencia del FMI.