Es poco probable que el apoyo a los complejos turísticos integrados en Japón disminuya tras la trágica asignación del ex primer ministro Shinzo Abe. Si hay un signo revelador de por qué esto es así, es el resultado de las elecciones del domingo para la Cámara de Consejeros de Japón.
Los legisladores ganan más escaños para respaldar al IR
El Partido de la Restauración de Japón y el Partido Liberal Democrático ganaron un escaño cada uno en el Komeito. Ambos partidos se han comprometido a mantener el rumbo hacia la realización de la visión original de Abe, que implica tres nuevos complejos de casinos en Japón que abrirán el país al turismo, reforzarán sus prefecturas y aportarán muchos ingresos fiscales.
Las elecciones eran importantes porque, en lugares como Osaka, donde es muy probable que se realice el primer complejo turístico integrado, a la espera de la aprobación del gobierno, es necesario que haya un fuerte apoyo político para garantizar que la oposición local no pueda poner trabas.
Así pues, tras las elecciones del domingo, el Partido Liberal Democrático controla ahora 146 escaños en la Cámara de Consejeros, lo que le da la mayoría de los 248 escaños. Esto significa que el partido tiene la oportunidad de dirigir las políticas a nivel gubernamental, y la visión de Abe quedará salvaguardada.
La oposición de Osaka es válida y vale la pena prestarle atención
Por supuesto, la oposición local de Osaka no carece de mérito y debe ser escuchada y considerada. Sin embargo, el Partido de la Restauración de Japón, aliado natural del Partido Liberal Democrático, controla actualmente los escaños de la prefectura de Osaka. Esto significa que, en caso de quererlo, el partido puede detener cualquier esfuerzo para abrir nuevas investigaciones sobre las preocupaciones planteadas por los lugareños.
El grupo de la oposición de Osaka ha conseguido reunir el 2% de los votos necesarios para iniciar un referéndum en el que se preguntará a los lugareños si realmente quieren que se construya un complejo turístico integrado en el territorio de la prefectura. Sin embargo, el gobierno local no está obligado a respetar esta medida y enviarla al gobierno central para que la estudie.
Los recientes resultados electorales sólo demuestran que hay más gente que apoya los proyectos de complejos turísticos integrados, al menos a nivel de gobierno. Que esto sea necesariamente una buena noticia para Osaka es otra cuestión.