El Banco Central de Brasil ha revelado sus planes para crear una moneda digital del banco central (CBDC) para 2024. El presidente del banco, Roberto Campos Neto, lo reveló en una conferencia organizada por Poder360.
Antes de generalizar el uso de la CBDC, el banco central realizará una prueba piloto de la moneda con instituciones financieras seleccionadas. Según el Presidente Roberto Campos Neto, una moneda digital puede mejorar la inclusión financiera si se añade a sus programas Open Finance y PIX.
En 2020, el banco central de Brasil puso en marcha el PIX y se ha generalizado su adopción. PIX tiene unos 122 millones de usuarios activos, es decir, el 57% de la población brasileña. Tras su éxito, el Banco de Pagos Internacionales elogió el esfuerzo, que rápidamente se convirtió en una referencia para otros países.
En 2021, Brasil también puso en marcha el programa Finanzas Abiertas para permitir el intercambio de datos de clientes entre instituciones financieras. Hasta ahora, el programa ha atraído a más de 800 instituciones financieras y 9,6 millones de clientes.
El Presidente Roberto Campos Neto cree que la tokenización de la moneda brasileña podría ser el próximo paso para impulsar la inclusión financiera en el país. Dijo: «Creo que este sistema digitalizado, de pago e integrado, con inclusión, va a ayudar mucho al desarrollo y a la inclusión de las personas en el mundo financiero«.
El camino hacia el lanzamiento de un CBDC
El anuncio de un proyecto piloto de CBDC se produce después de que el Banco Central de Brasil se asociara con nueve bancos que le ayudarán a desarrollar la CBDC. También se produce después de que la Cámara de Diputados brasileña aprobara el proyecto de ley sobre criptomonedas.
Recordemos que, tras casi tres años de trabajo, Brasil presentó en febrero un proyecto de ley sobre criptomonedas. El Senado aprobó el proyecto de ley en abril y lo envió a la Cámara Baja, donde se encuentra desde junio.
El proyecto de ley aprobado define un activo virtual (VA), un corredor o bolsa, y los departamentos del gobierno federal que deben tener jurisdicción sobre los asuntos relacionados con las criptomonedas. También prevé una pena de dos a seis años por fraude cometido con monedas digitales.
Si pone en marcha la CBDC, Brasil se unirá a países como Bahamas, China, Jamaica y Nigeria, que ya han lanzado CBDC. Además de mejorar la inclusión, Roberto Campos Neto cree que el paso a la cadena de bloques reducirá costes, disminuirá las barreras de entrada y mejorará el control de riesgos.
«Esto es lo que vemos en esta economía digital en Brasil«, concluyó.