Dmitri Medvédev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, declaró el miércoles que los saboteadores ucranianos que se oponen a la política rusa sobre la guerra en Ucrania y que han comenzado a operar en Rusia cometiendo atentados terroristas deben ser ejecutados en el acto sin juicio previo. Los rusos de a pie tampoco se libran de la ira de los dirigentes del Kremlin.
Medvédev recordó que durante la Segunda Guerra Mundial sólo había una sentencia para esos saboteadores, a saber, «la ejecución en el acto sin juicio».
«Si eres un traidor que cometió ese crimen durante la guerra, no tienes edad, ni nacionalidad, ni siquiera el derecho a proteger tu propia vida», dijo Medvédev.
Dijo que los ciudadanos rusos que se amotinaran durante la movilización y prendieran fuego a las oficinas de alistamiento militar o causaran daños a otras instalaciones estatales también podrían ser considerados traidores al país y deberían ser asesinados.
Medvédev subrayó que «la reintroducción de la pena de muerte es posible incluso con la actual Constitución rusa»
El peligro para los ciudadanos es aún mayor tras la salida de Rusia del Consejo de Europa a mediados de marzo, lo que significa que quienes se sientan oprimidos por el cruel régimen del Kremlin ya no pueden recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Fuente: The Kyiv Independent