Incidente extremadamente grave en Montenegro. Las autoridades públicas han detenido a 36 ciudadanos rusos sospechosos de espiar para Moscú. Dos montenegrinos son culpables de lo mismo y también están entre rejas.
Según Reuters, que cita fuentes no identificadas, 38 personas acabaron detenidas. Fue una operación especial lanzada por el Estado montenegrino.
El anuncio del Primer Ministro Dritan Abazovic
En un anuncio hecho en directo en una sesión de su gabinete, el Primer Ministro Dritan Abazovic dijo el jueves 29 de septiembre por la mañana que está en marcha una «operación internacional» organizada por la fiscalía estatal montenegrina con socios extranjeros para preservar los intereses del país. Abazovic no quiso dar más detalles, pero la información de que la operación es internacional, junto a socios extranjeros, deja mucho margen para la interpretación.
Según la publicación local Pobjeda, agentes de la Agencia de Seguridad Nacional de Montenegro (ANB) y de la Fiscalía Especial del Estado (SDT) detuvieron a seis diplomáticos rusos, 30 ciudadanos rusos con permiso de residencia temporal y dos montenegrinos. Todos son sospechosos de espiar para Rusia.
No es el primer escándalo de este tipo que se produce entre los dos países. En 2016, Montenegro acusó a agentes rusos de estar involucrados en un complot para derrocar al gobierno y llevar al poder a la oposición prorrusa. El plan también tenía como objetivo asesinar al entonces primer ministro Milo Djukanovic e impedir que la antigua república yugoslava entrara en la OTAN. En su momento, la Federación Rusa rechazó categóricamente estas acusaciones por considerarlas absurdas. Posteriormente, solo unos meses después, en 2017, Montenegro se incorporó a la Alianza del Atlántico Norte.
Montenegro, Estado miembro de la OTAN y candidato a la adhesión a la Unión Europea, se encuentra entre las naciones que votaron para imponer duras sanciones a Rusia tras su invasión de Ucrania. No hace mucho, las autoridades montenegrinas expulsaron a varios diplomáticos rusos.