Maurice Hastings, estadounidense de 69 años, fue encarcelado durante casi 40 años por un delito que no cometió. Ahora ha sido liberado después de que las pruebas de ADN demostraran su inocencia.
El hombre cumplió más de 38 años de prisión en California tras ser condenado por el asesinato de una mujer (Roberta Wydermyer) en 1983 y por dos intentos de asesinato.
El fiscal del condado de Los Ángeles, George Gascon, anunció -el viernes- que la condena por asesinato de 1988 ha sido anulada y Hastings ha sido puesto en libertad.
«Lo que le ha ocurrido al Sr. Hastings es una terrible injusticia. El sistema judicial no es perfecto, y cuando conocemos nuevas pruebas que nos hacen perder la confianza en una condena, es nuestra obligación actuar con rapidez», dijo Gascón, citado por Mediafax.
Hastings, que siempre ha mantenido su inocencia, dijo -en una conferencia de prensa- que quiere disfrutar de la vida y seguir adelante.
«He rezado durante muchos años para que llegara este día. No estoy señalando a nadie. Sólo quiero disfrutar de mi vida ahora, mientras la tengo», dijo.
Por cierto, en el año 2000, Hastings había solicitado una prueba de ADN para demostrar su inocencia, pero su petición fue inicialmente denegada.
En junio de este año, se descubrió que las pruebas de ADN de la época del asesinato coincidían con las de un hombre que murió en 2020 mientras cumplía condena por otros delitos, secuestro y violación, añadió la fiscalía.