Una turista de 45 años de la República Checa murió el sábado por la noche tras un desprendimiento de tierra en el hotel en el que se alojaba en la isla de Creta, según informaron los bomberos y la policía.
Su hijo y su marido fueron encontrados vivos bajo las ruinas de un hotel en Agia Fotia, en el sureste de Creta, dijo una fuente del servicio de bomberos a la AFP.
El niño, de nueve años, sufrió heridas en las piernas y fue hospitalizado, informa AFP, según Agerpres.
El incidente se produjo poco después de la medianoche, cuando varias rocas, entre ellas un enorme peñasco, se desprendieron de la montaña y cayeron sobre un hotel situado en la ladera, informaron la policía y la cadena de televisión pública ERT.
Parte del edificio quedó destruido por el desprendimiento, según la policía, y unos 40 bomberos buscaron entre las ruinas durante toda la noche en busca de posibles víctimas.
La familia estaba de vacaciones en Creta
Según la ERT, la familia estaba de vacaciones en Creta y debía regresar a la República Checa el domingo.
Al mismo tiempo, la cadena de televisión informó de que había varios acantilados por encima de las viviendas del complejo y que existía el peligro de que se derrumbaran.
Visitada por los turistas, la pequeña bahía de Agia Fotia es conocida por su arena fina y sus aguas cristalinas. El asentamiento se encuentra a menos de 15 kilómetros de la ciudad de Ierapetra, en el mar de Libia.
«Cada año, miles de visitantes vienen a pasar sus vacaciones aquí, y la región se encuentra entre las más populares de nuestro país», dijo George Vardakis, presidente de la Asociación de Hoteleros de Ierapetra.