El Alzheimer es un trastorno neurológico progresivo que hace que el cerebro se reduzca (atrofia) y las células cerebrales mueran. A grandes rasgos, la enfermedad es una forma de demencia, que se define como un término general para una disminución de la capacidad mental lo suficientemente grave como para interferir en la vida diaria. Para saber más, este Día Mundial del Alzheimer – que se celebra anualmente el 21 de septiembre, nos pusimos en contacto con el Dr. Vinay Goyal, director de Neurología del Instituto de Neurociencias del Hospital Medanta de Gurugram, quien nos habló de las diferencias entre ambas enfermedades, sus síntomas, su tratamiento, los cambios en el estilo de vida que pueden ayudar y el importante papel que puede desempeñar el cuidador.
¿Qué es el Alzheimer y en qué se diferencia de la demencia?
La enfermedad de Alzheimer es la causa más común de demencia degenerativa en la que las células cerebrales necesarias para la memoria mueren, dando lugar a la pérdida de memoria y al olvido. Existen varios tipos de demencia, como la relacionada con lesiones y la relacionada con infecciones. La enfermedad es más común en la quinta y sexta décadas de la vida, pero el 10-15% de los pacientes pueden presentarla a partir de los 30 años. Las personas pueden estar predispuestas a la demencia genéticamente, ya que tienen dos genes específicos, el presenil 1 y el presenil 2, cuya presencia se comprueba en las personas que se quejan de demencia en su edad media temprana y que progresa rápidamente. Las personas que tienen estos genes son propensas a desarrollar demencia a una edad de 30-45 años.
¿Cómo funciona el cerebro en ambas condiciones?
En la enfermedad de Alzheimer, las células cerebrales mueren en las zonas donde se almacena la función de la memoria, y muchas regiones del cerebro se encogen. Este proceso, conocido como atrofia cerebral, es generalizado en las fases finales de Enfermedad de Alzheimer, lo que provoca una importante pérdida de volumen cerebral.
El daño o la pérdida de células nerviosas y de sus conexiones en el cerebro provoca demencia. La demencia puede causar diferentes síntomas según la zona del cerebro que esté dañada. Suele interferir en la capacidad de funcionamiento de la persona; por ejemplo, una persona con demencia puede olvidar para qué se utilizan las llaves. La demencia no es una parte normal del proceso de envejecimiento.
Los síntomas más comunes del Alzheimer son
*Aumento pérdida de memoria y confusión: por ejemplo, la gente suele olvidar lo que ha desayunado, con quién se ha reunido por la mañana, etc.
*Pérdida de la memoria reciente: con el tiempo, las personas tienden a recordar sólo cosas de su infancia.
*Falta de capacidad para aprender cosas nuevas
*Dificultades de lenguaje, así como dificultades para leer, escribir y trabajar con números
*Dificultad para organizar el pensamiento y el razonamiento
*Corta capacidad de atención
*Incapacidad para identificar y localizar lugares, por ejemplo, algunas personas son incapaces de localizar sus habitaciones y baños en la casa
*Falta de orientación temporal
*Disminución del sueño
Los síntomas comunes de la demencia incluyen
*Pérdida de memoria
*Dificultad para comunicarse o encontrar palabras
*Dificultad con las habilidades visuales y espaciales, como perderse al conducir
*Dificultad para resolver problemas
*Dificultad para realizar tareas complejas
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Tratamiento y papel del cuidador
Es fundamental distinguir las afecciones porque el diagnóstico y el tratamiento se basan en los síntomas. Por ejemplo, la pseudodemencia, también conocida como falsa demencia, tiene síntomas similares a la demencia pero puede diferenciarse en el diagnóstico. En ambos casos de demencia y Alzheimer, el papel de un cuidador crece a medida que la enfermedad avanza.
Aunque todavía no se ha demostrado, hay pruebas sólidas de que varios factores asociados a llevar un estilo de vida saludable pueden contribuir a reducir el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer y otro tipo de demencia. (Fuente: Getty/Thinkstock)
Tenga en cuenta lo siguiente para los cuidadores o familiares
*Mantenga las cosas simples.
*Establezca una rutina diaria para que el individuo sepa cuándo ocurrirán ciertos eventos.
*Asegurar al individuo que está seguro y que usted está disponible para ayudarle.
*Preste atención a sus sentimientos más que a sus palabras.
*No discuta ni intente razonar con el individuo.
¿Qué tipo de cambios en el estilo de vida pueden prevenir ambas enfermedades?
Pacientes con Alzheimer deben realizar actividades físicas, dejar de fumar, llevar una dieta nutritiva y realizar actividades cognitivas. Además, se anima a las personas con demencia o enfermedad de Alzheimer a que desafíen sus mentes comiendo alimentos coloridos, lo que puede ayudar a prevenir o al menos retrasar la demencia. Se recomienda que el paciente realice actividades cerebrales como jugar a las cartas, al sudoku, etc.
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