Golpe a Joe Biden a sólo cuatro meses de las elecciones de medio término en Estados Unidos. La portavoz de la Casa Blanca, Kate Bedingfield, dejará su puesto en las próximas semanas, según el ejecutivo estadounidense.
Kate Bedingfield, impulsora de la campaña de Joe Biden y luego directora encargada de la comunicación del presidente demócrata, dejará la Casa Blanca a finales de julio «para pasar más tiempo con su marido y sus hijos pequeños», anuncia la Casa Blanca.
«Sin el talento y la tenacidad de Kate Bedingfield, Donald Trump podría seguir en la Casa Blanca, el plan de rescate y el proyecto de ley de infraestructuras podrían seguir siendo objetivos no realizados, y Ketanji Brown Jackson podría no estar en el Tribunal Supremo», dijo el miércoles el jefe de gabinete de Joe Biden, Ron Klain, a la CNN.
«Ha desempeñado un papel enorme en todo lo que el presidente ha logrado, desde su segundo mandato como vicepresidente hasta la campaña y desde que está en la Casa Blanca. Seguirá siendo una pieza clave para impulsar la agenda de Biden desde el exterior», añadió.
Una fuente familiarizada con la situación dijo a la CNN que Accessta dejará su cargo este verano. Bedingfield llevaba semanas sopesando la decisión de abandonar la Casa Blanca, según fuentes conocedoras de la situación, y sólo hace unos días comunicó formalmente su decisión a Klain.
Una posible sustituta de Bedingfield es Liz Allen, otra leal a Biden que trabajó para él cuando era vicepresidente y también fue subdirectora de comunicaciones del ex presidente Barack Obama. También se le encargó trabajar con Kamala Harris después de que fuera elegida para ser la candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos. Allen trabaja actualmente en el Departamento de Estado.