Una huelga nacional interrumpirá el tráfico aéreo en Bélgica el miércoles. Los sindicatos protestan contra la caída del poder adquisitivo. En el aeropuerto de Bruselas Zaventem, el mayor de Bélgica, se cancelarán casi la mitad de los vuelos previstos para el 9 de noviembre. Además, ningún avión despegará del aeropuerto de Charleroi, el segundo mayor del país.
Los responsables del aeropuerto de Bruselas Zaventem han advertido de que esperan «graves trastornos en las operaciones» a causa de la huelga, y han dicho que un gran número de vuelos han sido cancelados o reprogramados para evitar largos tiempos de espera o retrasos. En septiembre, el aeropuerto recibió unos dos millones de pasajeros, según Agerpres.
La página web del aeropuerto de Charleroi anuncia la decisión de cancelar todos los vuelos previstos para el miércoles 9 de noviembre.
Los servicios de transporte local también estarán paralizados el miércoles mientras los trabajadores marchan por las calles de Bruselas exigiendo mayores salarios y mejores condiciones laborales.
En Bélgica, la tasa de inflación anual subió al 12,27% en octubre de 2022, el nivel más alto desde junio de 1975, en medio de la explosión de los precios de los alimentos y la energía, según la fuente.