En un caso poco frecuente, los médicos lograron extraer del abdomen de una mujer de 24 años un fibroma gigante y poco común del tamaño de un feto de nueve meses en un hospital de Gurugram.
La bola gigante de mioma pesaba 3,5 kg y crecía en el interior de la paciente engullendo todo su abdomen, lo que le causaba dolor y malestar.
Los miomas son tumores musculares que crecen en la pared del útero y son de naturaleza no cancerosa.
La mujer de Bihar fue tratada con éxito en el Hospital CK Birla después de que un escáner y una resonancia magnética confirmaran que en su útero crecía un gran mioma de 27 x 17,5 cm. También se le diagnosticó una anemia grave.
Los médicos llevaron a cabo con éxito la intervención quirúrgica utilizando vasopresina diluida con líquido entre los planos del mioma y el útero (matriz), al tiempo que extraían con cuidado el gran tumor y garantizaban la mínima pérdida de sangre. Como la paciente tenía una anemia grave, se le administraron cuatro unidades de transfusión antes de la operación para aumentar su hemoglobina.
«Los miomas uterinos son menos frecuentes en las adolescentes que en las adultas. Su aparición en la población adolescente es infrecuente y se han documentado relativamente pocos casos en la literatura. En estos casos, la preservación de la fertilidad es difícil debido a su criticidad», dijo la Dra. Deepika Aggarwal, del Departamento de Obstetricia y Ginecología del Hospital CK Birla.
Además, añadió que estos tratamientos son un reto, ya que requieren un diagnóstico preciso y la perfección del tratamiento quirúrgico.
«En este caso, la paciente y su familia estaban preocupados por preservar su fertilidad, ya que era soltera. La línea de tratamiento tuvo éxito y no sólo preservamos su fertilidad, sino que también registramos una pérdida de sangre mínima, al tiempo que nos aseguramos de que saliera sana del postoperatorio. Se asesoró a la paciente sobre la planificación familiar y se le aconsejó que no concibiera durante un año para dejar que la herida cicatrizara», dijo la Dra. Deepika.
Según los funcionarios del hospital, la paciente estaba bastante preocupada cuando se enteró de su estado. Después de haber visitado a varios ginecólogos en los últimos cinco años, no le habían dado la seguridad de preservar su fertilidad, lo que la preocupaba mucho.
Los médicos del hospital le aseguraron que el mioma podría ser extirpado con una mínima pérdida de sangre y que su fertilidad sería preservada.
